el "claroscuro" (chiaroscuro) es un procedimiento desarrollado en la pintura para construir sentido de volumen o profundidad en el cuadro a partir de diferencia de valor de luz y sombra, más que por el delineado y recorte de las figuras o por la definición de posiciones según métodos como la perspectiva.
nos interesará su aplicación en la arquitectura como entendimiento de las relaciones de luz y sombra en términos graduales y no exclusivamente del deslinde de líneas de corte, sino del registro preciso de campos de variación.
el claroscuro permite especialmente describir y concebir los pasajes entre luz y sombra a partir de la incidencia de las sombras propias (las áreas oscuras de un cuerpo que están del lado opuesto a las que reciben la incidencia de la luz) más que de las sombras proyectadas (las que un cuerpo proyecta sobre su entorno), en particular en formas sin aristas rectas o nítidas (por ejemplo, bordes redondeados).
leonardo da vinci fue uno de los teóricos más importantes del claroscuro (que aparece visiblemente implementado en la mona lisa, para definir el volumen del personaje retratado, evitando un efecto de primer plano "chato" y para enfatizar su contraste con el fondo).
además da vinci desarrolló una teoría "de los velos" para denotar profundidad de campo, que también puede reconocerse en la misma pintura: el paisaje detrás de la figura se tiñe de celeste a medida que nos alejamos del primer plano, respondiendo al concepto de que el aire (por anlogía con el cielo) está ligeramente coloreado y que la superposición de velos de aire celeste con la distancia se densifica en el fondo y se aligera en el frente.
sin embargo, nos gustaría atender al procedimiento de claroscuro en otros dos pintores: el holandés rembrandt y el italiano caravaggio.
caravaggio construye los espacios predominantemente como escenas oscuras, fondos casi negros, de los que emergen personajes siempre parcialmente iluminados, empastándose y contrastando con el fondo localizadamente.
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.rembrandt lo convierte en una técnica central en varias de sus obras, en las que reduce la paleta de colores y difunde el registro ambiental drásticamente, describiendo un espacio denso, continuo y muy profundo sólo a partir de la presencia de la luz, construyendo por ese medio los límites de objetos y personas.